Historia:

 

El Parque Natural de Monfragüe, referencia obligada del bosque y matorral mediterráneo, se encuentra en la provincia de Cáceres, en el centro del triángulo formado por Navalmoral de la Mata, Plasencia y Trujillo.

 

Declarado Parque Natural en 1979, Monfragüe ocupa una superficie de 17.852 Hectáreas y representa uno de los enclaves mas extensos y representativos del bosque y matorral mediterráneo. El Tajo y su afluende, el Tiétar, proporcionan el medio acuático y esculpen en la cuarcita grandes farallones donde se asientan espectaculares colonias de buitres leonados y nidifican el halcón peregrino, el águila perdicera y el búho real. En sus orillas y cauces podemos encontrar al martín pescador, mitos, cormoranes y ruiseñores, además de otros relacionados con el medio acuático como la nutria.

 

Información General:

 

El conjunto de ecosistemas que conforman el Parque y su entorno, junto a su buen estado de conservación, hace que su principal característica sea su biodiversidad, favoreciendo la reproducción de mas de 200 especies de vertebrados, siendo uno de los refugios para la supervivencia de la cigüeña negra, buitre negro, águila imperial y otras muchas especies protegidas.

 

El paisaje del bosque y matorral mediterráneo, diferenciados a su vez por las umbrías y solanas, interrumpido por la cuarcita y bordeados los cauces de sus arroyos por alisedas y fresnedas, ofrece una gran variedad florística donde se asientan y obtienen refugio y alimento multitud de especias animales de gran interés para el naturalista.

 

Vista de la dehesa:

 

Bordeando el Parque se encuentra la dehesa, ecosistema modelado por la mano del hombre, y ejemplo del equilibrio hombre-naturaleza. Es aquí donde las grullas , venados y jabalíes, cigüeñas y garcillas, se alimentan junto al ganado que pasta el rico alimento sombreado por encinas y alcornoques. Sobrevolando la dehesa veremos a las grandes rapaces que, junto a pequeños pajarillos, se alimentan de sus productos.

 

En el castillo, del siglo XII, que domina el parque desde su posición estratégica, cuenta con emocionantes leyendas que nos recuerda el pasado guerrero de la historia de Monfragüe.

 

Se pueden encontrar chozos de pastores trashumantes, antiguos molinos de agua, pozos romanos y el Puente del Cardenal, construido en el s. XV como único paso seguro entre Plasencia y Jaraicejo.

 

Por todo lo expuesto, el Parque Natural de Monfragüe ofrece un excelente lugar donde disfrutar con la Naturaleza.

 

La fauna que predomina en la zona, principalmente son salamandras, zorros, cabra montesa, jabalí, conejos, etc. Pero sobre todo destacar algunas especies protegidas como son la cigüeña negra, gato montés y nutrias, que conviven libremente en la majestuosidad y libertad de estas tierras de Las Hurdes.

 

En la comerca y entre una sucesión de sierras y picachos agrestes y ásperos, un abigarrado paisaje entrelazado de escarpadas montañas, podemos encontrar una variada flora autóctona dentro de la cual se destacan los árboles: acebos, fresnos, encinas , castaños, madroños, robles, pinos, etc. En cuanto a plantas encontraremos jaras, carquesas, escobas y brezos.

 

Como parajes de interés natural vamos a resaltar principalmente dos grupos, por un lado tenemos la red de miradores y por otro lado tenemos parajes relacionados con el río, caidas de agua que se producen de forma natural en el curso del río o de pequeños arroyuelos que al poco de nacer se encuentran con algunas barreras naturales y surgen los llamados chorros o caídas de agua.

 

Todos ellos parajes naturales de gran belleza.

 

Las principales son:

 

• - Chorro de la Miacera (El Gasco)
• - Chorrituero de Ovejuela
• - Chorro de los Ángeles
• - Chorreón del Tajo
• - Chorrera de Arrrobatuequilla
• - Garganta de Aceitunilla
• - Garganta de Cambrón
• - Garganta de Horcajada
• - Cascada del Ceño
• - Chorrera de la Buitrera (Sauceda)
• - Chorrera de los Sereais (Sauceda)
• - Garganta del Moral (Sauceda)
• - Chorrera de los Correlones (Erías)

 

Respecto a la mejor época para visitar estos parajes, podemos decir que prácticamente todo el año se pueden encontrar interesantes las visitas a cada uno de ellos.

 

Pero es en primavera y verano cuando encontramos un gran afluente de agua, que la da más belleza, si cabe, a toda la zona y hace que a su alrededor podamos contemplar una vegetación en plena vida.

 

 

 

El Valle del Jerte está situado en la provincia de Cáceres, Extremadura, España, muy cerquita de la frontera con Portugal. Los pueblos del Norte cacereño se hallan en las estribaciones de la Sierra de Gredos, la orografía de sus tierras es montañosa y escarpada y el paisaje muy verde y frondoso.

 

El Valle del Jerte se encuentra entre dos montañas, cuya altura máxima es de 2460m. Es una comarca que tiene fronteras con la provincia de Ávila y con las comarcas cacereñas de La Vera y el Valle de Ambroz. Su capital natural es Plasencia (Cáceres), ciudad medieval fundada por Alfonso VIII sobre las ruinas de un poblado mas antiguo llamado Ambrós. Plasencia tiene unos 40755 habitantes aproximadamente, y el Valle del Jerte unos 15.000. A tan solo dos horas de Madrid se halla de gredos un paraíso natural llamado Valle del Jerte, gargantas cristalinas, extensos bosques de roble y castaños. Rincones típicos de arquitectura tradicional y cómo no el fantástico río Jerte con sus aguas cristalinas el cual da nombre a la zona.

 

El Jerte es una Comarca natural situada en el Noreste de la Provincia de Cáceres, que limita por el Norte con la comarca de Ambroz y las provincias de Ávila y Salamanca: y por el Sur con Plasencia y la comarca de La Vera.

 

El Valle del Jerte está formado por 11 pueblos: Barrado, Cabezuela del Valle, Cabrero, Las Casas del Castañar, Jerte, Navaconcejo, Piornal, Rebollar, Tornavacas, El Torno y Valdastillas. El Jerte está constituido básicamente por las estribaciones sur de la sierra de Gredos y por la Sierra de Candelario al Norte, por la sierra de Tormantos y la San Bernabé por saliente y la de Tras la Sierra por poniente.

 

Las alturas máximas que se dan en el Valle son las del Calvitero (2405 m.) y el Torreón (2401 m.) por el Norte y la Covacha (2399 m.) por el Noreste

 

El nombre del río que recibe el Valle se lo debemos a los Árabes, quienes bautizaron al río con el nombre de Xerit o Xerete, cuya traducción sería: Río de aguas cristalinas, o río angosto.

 

Tanto la orientación particular (Noreste - Suroeste) como la protección que le otorgan las montañas que lo encajonan, hacen que exista en esa zona un microclima caracterizado por inviernos no muy fríos y veranos con temperaturas suaves, así como un nivel de precipitaciones medio alto.

 

La naturaleza jerteña, con un microclima excepcional durante todo el año cobra unas características muy especiales en la primavera y en concreto en el Valls, cuando mas de dos millones de cerezos plantados en estas bellas montañas abren sus flores y con ello inundan el valle de una increíble imagen nevada que se reparte maravillosamente por las riberas y las laderas de las sierras por donde circula el río Jerte.

 

Entre paisajes de cerezos, castaños y robles, y un sin fin de especies vegetales, el viajero que desea conocer y recorrer la ruta por antiguos cordeles de trazados medievales o por interesantes y bien conservadas calzadas de la época romana, puentes renacentistas y todo ello por una ruta magníficamente señalizada e indicada desde la población de Tornavacas, o desde el centro de interpretación de la "reserva natural" de la garganta de los infiernos en la localidad de Jerte.